Ayuso achicharra a Sánchez y le pone contra las cuerdas

Ayuso va a vencer a Sánchez. Es tanta la obsesión del mandamás socialista hacia la presidenta madrileña que ha rebasado líneas morales y legales inauditas de traspasar para competir con un rival político. Isabel Díaz Ayuso es una política implacable. Su valentía la convierte en un adversario temible. Aquellos que se enfrentan a ella deben saber que o le ganan o van a perecer. Y es una mujer de las que no suelen perder ni a las tres en raya. Pedro Sánchez, tozudo, tropieza una y otra vez contra la misma piedra y va a arrepentirse mil veces de su torpeza al ponerla en su punto de mira.

Los estrategas monclovitas no deben haber caído todavía en que la competencia de su jefe con la presidenta de Madrid es desigual. Sánchez no tiene credibilidad y, sin embargo, a Ayuso, le sobra. El duelo es injusto. La lideresa del PP obtiene mayorías absolutas en cuanto se abren las urnas. El líder socialista, pierde las elecciones, como las últimas generales, contra Alberto Núñez Feijóo. A ella, la gente la adora, como si fuera una estrella del rock. A él le abuchean y agreden con rastrillos.

Sánchez, que se cree el pistolero más apuesto de “OKCorral”, la ha desafiado a un combate constante. Pero, la lideresa madrileña, que ya quitó de en medio a los españoles algunos tan antipáticos como Pablo Iglesias, Iñigo Errejón y Mónica García, sabe soportar la mirada a Ferraz, a La Moncloa y a todo el Consejo de Ministros. El líder socialista madrileño hoy, Juan Lobato, el Fiscal General del Estado, la jefe de gabinete del jefe de gabinete del presidente del Gobierno, el ministro Óscar López, ahora mismo, están todos por los suelos enfangados de un plumazo. Ayuso es quien desenfunda más rápido. Y su personalidad y carisma tienen un recorrido enorme. A.M.BEAUMONT