Pedro Sánchez encubre otra corruptela: ¿Qué le debe a la directora del CNIO que gasta el dinero del cáncer en viajes?

¿Cómo llegó María Blasco a dirigir el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO)? Y lo más importante ¿Por qué nadie se atreve a cesarla pese a gastarse hasta un millón de euros de la investigación contra el cáncer en viajes y obras de arte? La respuesta podría estar en el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que estaría encubriendo otro caso más de presunta corrupción en su Gobierno.

Hasta ahora, todas las miradas se dirigían a la ministra de Ciencia, Diana Morant, por la falta total de toma de medidas en el CNIO pese a las denuncias de los propios trabajadores sobre las prácticas abusivas de su directora, María Blasco, y las escandalosas infamaciones como gastarse 600.000 euros de dinero público en viajes o un millón en comprar obras de arte, acciones que poco tienen que ver con la investigación. Pero las orden de no tocar a la principal responsable del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas vendría directamente de Moncloa.

Fue el propio Pedro Sánchez quien introdujo a María Blasco en las redes del PSOE, cuando siendo líder de la oposición la actual directora del CNIO hacía de reclamo a la causa socialista y a la campaña ’10 acuerdos de país’ con la que el ahora presidente hacía campaña contra Mariano Rajoy.

El actual presidente quería vender entonces en 2018 -justo antes de la moción de censura- un supuesto apoyo de la comunidad científica frente “a la parálisis del Gobierno de Rajoy”, y para ello María Blasco, por su trayectoria científica, era perfecta, colocada para la ocasión junto a Pedro Sánchez. El muñidor de esta estrategia era Francisco Polo, entonces flamante fichaje de Sánchez del mundo empresarial, que quería ser ministro pero acabo de alto comisionado en el ministro.

Pedro Sánchez llegó a la Moncloa y el resto de la historia ya se la saben, y como favor con favor se paga, María Blasco se consolidó al frente del CNIO, donde el sanchismo le ha protegido contra fuego y marea. ¿Por qué? ¿Es intocable después de lo conocido? La ministra Diana Morant, pese a las denuncias de los científicos, sigue mirando para otro lado y hasta defiende su continuidad porque según ella “el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas vive uno de sus mejores momentos” pese a no tener presupuesto para material y si para los viajazos y cuadros de su directora. Pero la protegida tendría un padrino superior para blindarse: el propio Pedro Sánchez.