Las fotos del Rey Juan Carlos desnudo boca abajo tomando el sol revolucionan Telecinco

Mientras se sigue debatiendo sobre las fotos en bikini de la Princesa Leonor y sus antecedentes en la Familia Real (donde prácticamente todos sus miembros han sido cazados en traje de baño en alguna ocasión), su abuelo Juan Carlos divide a partes iguales la atención mediática que está recibiendo por su denuncia a Miguel Ángel Revilla con sus aventuras y desventuras en sus "pilladas in fraganti" con los paparazzi.

A medio camino entre ambos debates, este jueves Tardear recuperó una de las pilladas históricas a un miembro de la Corona disfrutando del sol y el mar; la de Juan Carlos I en agosto de 1989 cuando se le tomaron las fotografías más polémicas hasta la fecha. 

Y es que el entonces Rey de España disfrutaba de sus vacaciones en el yate Fortuna y fue retratado tomando el sol boca abajo en cubierta y totalmente desnudo.

Tal como recordó Antonio Montero en el plató de Frank Blanco y Verónica Dulanto de aquellas vacaciones se tomaron más de 500 instantáneas por parte de varios paparazzi, uno de ellos el propio colaborador de Telecinco. 

Muchos años después, Montero desveló todos los detalles en concreto de este reportaje de 32 imágenes que no se llegó a publicar en ningún medio de comunicación en España por las presuntas amenazas del Rey.

Según la narración del periodista, al yate Fortuna le acompañaban más de 700 policías destacados protegiendo a la Familia Real, una dragaminas del ejército que "iba asistiendo las comunicaciones del barco" y dos lanchas con ocho policías cada una, por lo que Juan Carlos I estaba "bastante protegido".

Y a pesar de todo, 6 personas de diferentes agencias fueron capaces de burlar el cordón de seguridad en una punta de una cala muy profunda de Mallorca. Aunque el barco estaba escondido en uno de aquellos acantilados fue localizado gracias a una importante pista: "Yo por aquel dragaminas situado en un punto del horizonte es por lo que pensé el barco está aquí y no lo estamos viendo desde tierra".

Dicho y hecho, Antonio Montero se acercó a la punta donde ya había dos fotógrafos captando el momento: "Me dijeron no te lo vas a creer". De hecho, se asustó un poco porque "en esa época no le podíamos hacer una foto bebiendo agua, entonces verle boca arriba era un show". Claro que a su juicio lo más alarmante fue que pesar de la seguridad, desde el punto en el que estaban colocados los paparazzi "de una pedrada le podía haber matado".

Los fotógrafos llegaron a un pacto de no filtrar aquellas imágenes porque "si el Rey se entera que lo hemos visto en pelotas nos van a crujir, nos van a echar de la prensa, nos van a cerrar las agencias".

Mucho han cambiado los tiempos pero las imágenes del Emérito desnudo tomando el sol boca abajo en la cubierta de su yate siguen impactando. Tanto que este jueves Tardear cosechó una de sus mejores jornadas anotando un 10.1% de share y 876.000 espectadores, sus mejores cifras desde hace más de un mes.