El impagable favor del fiscal general a Feijóo: cada día sin dimitir es un regalo al PP

Dice el fiscal general, el investigado Álvaro García Ortiz, que no dimite porque, de hacerlo, “estaría haciendo una concesión a los delincuentes”. A los delincuentes no se sabe, pero lo que está claro es que cada día que pasa enrocado en su cargo es una concesión al Partido Popular. Un favor a Feijóo, en suma, impagable.

Fíjense, en el análisis político siempre hay dos dimensiones: la moral y la estratégica; y en tantas ocasiones no coinciden los deseos. Y esto ocurre en Génova 13 con el imputado fiscal general del Estado: a nivel moral desean los ‘populares’ que dimita porque su investigación desprestigia, evidentemente, a la Fiscalía -como institución- pero, ya a nivel estratégico, rezan diariamente para que no dimita. Es un regalo.

“No nos hace ningún favor el que se vaya, al contrario”, destaca a una fuente de la máxima confianza de Feijóo en clara alusión a las palabras que este martes vertió Álvaro García Ortiz en la Comisión de Justicia en el Senado. “Cada día que pasa en su cargo enturbia la escena pública y nos da pie a la crítica”, asevera el mismo destacado ‘popular’ consultado. Y claro que tiene razón.

El que el fiscal general se niegue a dimitir a quien únicamente beneficia es a la oposición a Pedro Sánchez, al PP en especial. Esa es la realidad. Pero desde luego no a una institución, la Fiscalía General del Estado, que cada vez se ve más y más desprestigiada. Porque, precisamente, una de las funciones del fiscal general es salvaguardar el prestigio de la institución que representa: da igual que sea inocente o culpable del presunto delito de revelación de secretos por el que se le investiga, debería haber dimitido -aunque la investigación concluya que es inocente y se acabe archivando todo- porque su mera imputación está perjudicando, y mucho, a la imagen del Ministerio Público. El apartarse, en fin, sería lo más profesional que Álvaro García Ortiz podría hacer si realmente valorara a la institución que preside.