Aznar alerta: la cesión de competencias en inmigración a Cataluña es "mucho más grave" que el 1-O

José María Aznar vuelve a hacer público lo que piensa. Y lo dice sin rodeos. "En ninguna cabeza cabe que un Estado ceda las competencias de control de sus fronteras y de inmigración sin que deje de ser un Estado. Y es lo que está pasando en España, lo voy a decir con toda claridad: lo que ha ocurrido es mucho más grave que el golpe de Estado del 1 de octubre"

El expresidente del Gobierno ha vuelto a alzar la voz ante lo que considera una cesión inadmisible del Estado a la Generalitat de Cataluña. El exlíder del Partido Popular ha asegurado que el traspaso de competencias en materia de inmigración a la administración catalana supone "un golpe institucional de mayor calado" que el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017.

Para Aznar, el PSOE y Sumar están entrando en un proceso acelerado "de desintegración de la nación española y descomposición del Estado", y cree que el Estado se está yendo de Cataluña. 

Aznar habla de "cómplices"

En su opinión, esta es la política actual del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y también la del presidente de la Generalitat, Salvador Illa: "Porque una cosa es ser educado ir a saludar a los actos y otra cosa es ser cómplice y partícipe de una política de destrucción del Estado".

Para Aznar, lo que les queda por hacer es ahondar "un poquito en la justicia para que todo se tenga que decidir judicialmente en Cataluña y que el Tribunal Supremo de España deje de ser el Tribunal Supremo de toda España, y queda una consulta".

"Y si usted me dice: ¿usted cree que Sánchez e Illa son capaces de hacer las dos cosas y la consulta también? La respuesta es sí", ha añadido el exjefe del Ejecutivo en la entrevista concedida en ABC. El expresidente del PP ve reversible esta situación en un futuro siempre que se esté dispuesto a pagar el coste de esta reversión, ha apuntado. Pese a todo, ha defendido la necesidad de pagar este coste porque "la alternativa es la disolución", algo que no está dispuesto a vivir y que está dispuesto a hacer todo lo posible para que no se produzca.

Descontrol y descoordinación

Los críticos de esta medida que otorga a Cataluña el control de fronteras, entre ellos Aznar, argumentan que otorgar este poder a la Generalitat podría derivar en un sistema de control diferenciado dentro de España, con criterios distintos a los del resto del país y un riesgo potencial de descoordinación con las políticas migratorias estatales y europeas. 

Desde Presidencia del Gobierno, sin embargo, defienden que la transferencia de competencias responde a un modelo descentralizado que permite una mejor gestión de los flujos migratorios en el territorio catalán. Moncloa insiste en que la Generalitat de Cataluña deberá cumplir con el marco legal estatal y europeo en materia de inmigración.