El Real Madrid desata la guerra contra los árbitros españoles ¿Qué pasará ahora?
Durísimo comunicado del club blanco contra el colectivo arbitral de la Federación Española y respuesta unánime desde todos los sectores futbolísticos. Los árbitros meditan ir a la huelga por las acusaciones blancas

Jude Bellingham, en el partido ante el Espanyol
El Real Madrid ha lanzado un comunicado contundente que ha sacudido los cimientos del fútbol español. En él, el club blanco acusa directamente a los árbitros de perjudicar deliberadamente al equipo en decisiones clave durante los últimos partidos. Las palabras, cargadas de dureza, no tardaron en generar una cascada de reacciones entre los principales actores del fútbol nacional.
La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha respondido con un tono institucional, recordando que las designaciones arbitrales son imparciales y que los errores son parte del juego. Sin embargo, según fuentes cercanas, la tensión ha escalado en los despachos, donde los responsables de arbitraje consideran las acusaciones como un ataque directo a su profesionalidad.
Javier Tebas, presidente de LaLiga, también se pronunció rápidamente. En una declaración pública, criticó al Real Madrid por oponerse en 2023 a una reforma arbitral similar a la que ahora propone mientras tiró la piedra y escondió la mano sobre "sistemas corruptos". “Que apaguen la radio”, señaló el presidente del Barcelona, Joan Laporta, mientras el jugador Eric García llamó a la misiva madridista “la carta de los Reyes Magos”.
La tensión ha llegado incluso al colectivo arbitral, que según algunas fuentes estaría considerando convocar una huelga como medida de protesta ante las declaraciones del club blanco. Este movimiento podría paralizar la próxima jornada de LaLiga, algo que generaría un terremoto mediático y deportivo en un calendario ya saturado.
En las redes sociales, las opiniones están divididas. Mientras unos apoyan la postura del Real Madrid, denunciando lo que consideran errores sistemáticos en su contra, otros critican al club por fomentar un clima de confrontación que, según ellos, solo desestabiliza el fútbol español mientras aseguran que el Real Madrid tiene poco de lo que quejarse.