Campanar sufre una ola de robos en Nochebuena

Como si se tratara del cuento del Grinch, una oleada de robos ha empañado las celebraciones navideñas en el barrio de Campanar. Durante la madrugada de Nochebuena, más de media decena de vehículos fueron violentados para sustraer regalos y otros objetos de valor, dejando a numerosas familias afectadas. Se estima que el valor del botín supera los quince mil euros, sin contar los daños materiales ocasionados.

Los delincuentes emplearon un método sistemático en todos los casos: rompían pequeños cristales para desbloquear los seguros y acceder al interior de los vehículos. Una vez dentro, se apropiaban de los artículos almacenados, entre ellos regalos navideños.

Fuentes no oficiales de la Policía Nacional confirmaron a ESdiario que las denuncias comenzaron a recibirse el día de Navidad y que los robos se concentraron en diferentes puntos de Campanar. Este patrón apunta a una planificación deliberada para perpetrar los delitos durante la festividad.

Además, las mismas fuentes señalan una posible conexión entre estos robos y el foco de ocupación ilegal situado en el edificio de la calle Padre Pedro Mirón, en la intersección con la plaza Baden Powell, frente a Nuevo Centro. Dicho inmueble ha sido motivo de conflicto durante años, mientras vecinos y autoridades esperan la ejecución del Plan Especial de Urbanismo del Barrio de Campanar.

Los residentes denuncian un incremento de robos en los últimos años, relacionados con el fenómeno de la ocupación ilegal. Aunque las intervenciones de la Policía Nacional y Local lograron mitigar la situación en la calle Mosén Rausell, el problema parece haberse trasladado a otras zonas del barrio. “No puede ser que vivamos atemorizados en nuestra propia casa”, declaró uno de los vecinos afectados, quien reclamó mayor presencia policial y acciones contundentes contra los okupas y la delincuencia.