Castilla-La Mancha celebra la condonación de deuda pero rechaza el reparto del impuesto a la banca

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha mostrado su "triple satisfacción" ante la propuesta del Ejecutivo central de condonar casi 5.000 millones de euros de deuda a la región. Sin embargo, ha manifestado su rechazo al reparto del impuesto a la banca entre las comunidades autónomas, asegurando que este modelo beneficiaría a los territorios más ricos en detrimento de los más desfavorecidos.

En rueda de prensa, el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha valorado positivamente la condonación de deuda, subrayando que Castilla-La Mancha es la comunidad "a la que más se le condona por habitante ajustado". Según los datos ofrecidos, la cifra alcanza los 2.319 euros por habitante ajustado, superando la media nacional de 1.874 euros. Además, la medida permitirá reducir la ratio de deuda en relación al PIB del 30% al 20%, lo que supone un alivio financiero significativo para la región.

No obstante, Ruiz Molina ha cuestionado la forma en la que se comunicó la decisión, señalando que las comunidades fueron informadas "un minuto después" de que el líder de ERC, Oriol Junqueras, anunciara el acuerdo en redes sociales. "Parece que se estaba esperando a que Junqueras mandara el tuit para luego mandarnos a nosotros el correo", criticó el consejero, aunque matizó que, más allá de las formas, "el fondo es positivo para Castilla-La Mancha".

Por otro lado, el consejero ha reiterado el rechazo del Gobierno regional al reparto del impuesto a la banca en función de la riqueza de cada comunidad. "Es difícil explicar a la sociedad que se recauda un impuesto a los más ricos para dárselo a los más ricos", afirmó, comparándolo con un "Robin Hood al revés". En su opinión, aceptar este criterio implicaría avalar una "financiación singular para Cataluña", algo que considera injusto y contrario a la igualdad entre comunidades.

Ruiz Molina también ha enviado un mensaje al líder del PP en Castilla-La Mancha, Paco Núñez, instándole a que sus diputados en el Congreso voten a favor de la condonación de deuda. "Rechazar esta propuesta sería como negarse a que un banco reduzca la hipoteca de una familia", explicó, recordando que la actual deuda de la región es consecuencia, en gran parte, de la gestión del PP en la etapa de María Dolores de Cospedal.

Finalmente, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha insistido en que la condonación de deuda no debe ser un obstáculo para avanzar hacia un nuevo modelo de financiación autonómica más equitativo. "Desde 2017 venimos reclamando esta condonación, y seguiremos exigiendo una reforma justa para nuestra región", concluyó Ruiz Molina.